domingo, 9 de octubre de 2011

Padres y leucemia

Un diagnóstico de cáncer o leucemia trae consigo un sentimiento de angustia y temor, en particular cuando el paciente es un niño, y las emociones en sus padres y familiares son especialmente devastadoras. Hoy en día, cada año 3.5 casos nuevos de Leucemias son diagnosticados por cada 100.000 niños menores de quince años de edad, y más de la mitad de ellos tienen la posibilidad de curarse de su enfermedad. Este texto fue creado por la fundación Diana Sarmiento Medina, con el objetivo de presentar toda la información necesaria para que los padres y familiares de un infante que padece de leucemia, se sientan mas tranquilos y logren superar algunos de los temores que poseen y así dar apoyo a sus hijos con mayor seguridad. En este texto abordaremos el tema de las emociones por las cuales tiene que pasar la familia principalmente padres y hermanos.

La confusión es un sentimiento que abruma a los padres en el preciso instante en el cual se les comunica sobre el diagnóstico de que su hijo esta enfermo. Desde ese momento el padre entra en un estado de bloqueo, por lo general los médicos están conscientes de esto y comprenden la situación, por lo cual están dispuestos a ofrecer nuevas explicaciones cuantas veces sea necesario para que el padre entienda cual es el procedimiento a seguir. La negación es una emoción que sirve como mecanismo de defensa personal, sin embargo, no se debe mantener en esta por mucho tiempo ya que si esto ocurre se estará perdiendo valioso tiempo de tratamiento. El miedo también se hace presente en estos momentos, el futuro de su familia y el futuro de su hijo son las mayores preocupaciones de los padres, sin embargo, todos los padres lucharán hasta el cansancio  y no ahorrarán esfuerzo alguno para que su hijo salga adelante. Así mismo, la ira puede apoderarse de los pensamientos de un padre, es posible que muchos padres se sientan indignados con Dios por haber escogido ese destino cruel para ellos -es normal que se pregunten porque a ellos-. Este sentimiento de ira debe desaparecer puesto que la culpa no puede ser contribuida a ninguna persona. Así pues es necesario saber que aunque algunas emociones son completamente normales, algunas de estas pueden resultar dañinas para la familia y se deben dejar atrás.

En la segunda parte de este texto se tratan las nuevas responsabilidades de los padres. Los padres, desde el momento en que se les da la noticia deben empezar con la toma de decisiones, esto, iniciando con el tratamiento a seguir, es importante que los padres sean capaces de adaptarse de forma rápida al nuevo estilo de vida que esta por comenzar. Para esto es importante el apoyo de los médicos, y todas aquellas personas que influyen en el tratamiento, preguntar, resolver dudas, es una buena idea para la toma de decisiones sobre el tratamiento adecuado para su hijo. También, es normal que entre los familiares se genere una seria de desacuerdos, peleas entre los miembros de la familia se deben evadir puesto que podrían afectar al pequeño. Para esto, la fundación diana recomienda crear acuerdos y sobre todo, mantener una linea de comunicación abierta entre todos los integrantes de la familia, especialmente entre el padre y la madre ya que de esta forma se tiene en cuenta la opinión de cada padre y se proporciona un sentimiento de unión al hijo enfermo. Los padres también deben aprender a conservar la energía, para esto, es importante que los padres eviten emprender modificaciones en su vida, tales como cambiar de trabajo, cambiar de vivienda, asumir un estado civil diferente o hacer cambios bruscos en su estilo de vida. Estos cambios, implican estrés, que acumulado con la situación de la enfermedad de su hijo pueden afectar el núcleo familiar de forma severa. En cuanto a los otros parientes, es necesario entender que todos son diferentes y que las reacciones de cada persona ante una noticia como esta son diferentes, algunos proporcionaran apoyo, otros por ejemplo, recomendaran segundas opiniones, y otros recomendaran que se lleve al niño a donde se le lleve a cabo un tratamiento de medicina no tradicional tales como curanderos o yerbateros.  Como conclusión, es necesario que la familia continué con su vida normalmente, cuanto sea posible, siempre ayudándose de los médicos y apoyándose los unos a los otros.

Recapitulando, se nombraron las emociones que generalmente sienten los familiares de una persona enferma cuando se les diagnostica una leucemia. También se paso por las responsabilidades y las actitudes que deben enfrentar los padres y como aliviar este peso. Este texto es bastante importante ya que no trata la leucemia como una enfermedad de un solo individuo, sino que reconoce que esto afecta también a las personas alrededor del enfermo y busca darle formas de solución a estos sentimientos.

Aspectos emocionales de la leucemia infantil "un manual para padres". Parte I: Tu, El padre o La madre. (pp. 11-23)